Comparaciones Angela Tormo “Es imposible la salud psicológica, a no ser que lo esencial de la persona sea fundamentalmente aceptado, amado y respetado por otros y por ella misma”. (Abrahan Maslow) Hay un dicho popular que reza “Las comparaciones son odiosas”, y efectivamente así es. No hay nada que sea más deleznable y artificioso que una comparación porque nadie puede ser comparado con nadie, ni siquiera los hermanos gemelos que son los que más genes comparten y sitúan en el mismo ambiente desde el nacimiento, todo lo cual podría hacerlos más parecidos pero nunca iguales. Cada persona es un ser único e irrepetible, con permiso de la clonación. ¡Claro que los hijos son diferentes! Precisamente hay que valorar y respetar esa diferencia que los hace sujetos únicos. Es posible que un niño no sea tan brillante en matemáticas como su hermano, su prima, su amigo, pero seguro que tiene otras capacidades en las que pueda sobresalir: la música, el dibujo, los deportes… Cuando...