El fin de semana pasado asistí al taller de manejo de estrés impartido por la Mtra. Elena Marquina Barrera y quiero compartir mis experiencias con ustedes.
En primer lugar asistí a este taller porque en los últimos meses he estado leyendo algunos libros y artículos y viendo algunos videos relacionados con el estrés. Me ha interesado este tema debido que en nuestra sociedad actual la mayoría de las personas hablan de estar estresadas casi todo el tiempo.
¿Pero qué es el estrés? ¿Qué lo produce? ¿De que manera nos afecta? ¿Cómo lo podemos evitar o eliminar? Estás son las preguntas que me llevaron a empezar este estudio y por lo tanto al ver programado este taller de inmediato me inscribí.
Este taller no me dio las respuestas a éstas preguntas ya que no se manejó un aspecto teórico. Pero sí puedo decir que fue un taller que me dejó un muy buen sabor de boca. Al final del día y medio que duró el taller, salí mas relajado que cuando entré, podría decir que menos estresado aún sin saber a cabalidad cual es el concepto o definición de estrés que tienen la maestra y mis compañeras de taller.
En primer lugar me sorprendió ser el único hombre en el taller. La mayoría de mis compañeras en el taller cursan la Maestría en Psicoterapia Infantil Guestalt y una que otra la Maestría en Psicoterapia Guestalt y también participaron tres terapeutas de la clínica Yoloma.
Mi primera reacción fue sentirme algo extraño rodeado de puras mujeres y de inmediato me surgieron estas preguntas: ¿acaso las mujeres padecen el estrés más que los hombres?, ¿o será qué los hombres no lo reconocemos o es algo que ya damos por hecho, o sea que el estrés es una parte ineludible de nuestras vidas y que no se puede hacer nada al respecto?
Otra pregunta me surgió cuando nos fuimos presentando uno a uno en el taller y me di cuenta de que la mayoría de mis compañeras cursaban la maestría infantil: ¿será que el trabajo con niños es más estresante que otras actividades?
Aspectos interesantes para considerar en este estudio acerca del estrés que estoy emprendiendo.
Bueno, regresando al taller, como decía al principio, no se habló casi nada acerca de la teoría del estrés y sus causas, fue un taller vivencial en el que la Mtra. Elena Marquina nos fue llevando a través de una serie de técnicas que podemos utilizar para reducir el estrés en nuestras vidas.
Después de cada actividad había un periodo de intercambio de nuestras ideas y sensaciones y para mí esto fue lo más rico del taller, ya que el escuchar las experiencias de mis compañeras me ofreció un panorama muy amplio de las diferentes situaciones de sus vidas que les causan estrés. Para mi esto fue un gran aprendizaje y pude vivir lo que ya había encontrado escrito en los textos que he leído y en los videos que he visto.
¿Y es qué el estrés?, (ahora entraré en un poco de teoría)
“El Dr. Hans Selye empezó a utilizar el término estrés a principios de la década de 1950 basado en sus extensos estudios psicológicos acerca de lo que sucede cuando se lastiman los animales o se encuentran bajo condiciones inusuales o extremas.
“En su uso popular la palabra estrés se ha convertido en un término genérico que connota todas las diferentes presiones que experimentamos en la vida. Desafortunadamente, esta manera de utilizar la palabra confunde si el estrés es la causa de las presiones que sentimos o el efecto de esas presiones, o para ponerlo en términos más científicos, si el estrés es el estímulo o la respuesta. A menudo decimos cosas como “me siento estresado” lo que implica que el estrés es lo que estamos experimentando en respuesta a lo que sea que nos está haciendo sentir de esa manera, y por el otro lado, “hay mucho estrés en mi vida”, que implica que el estrés es un estímulo externo que hace que nos sintamos de cierta manera.
Seyle optó por definir el estrés como una respuesta, y propuso otra palabra: “estresor”, para describir el estímulo o evento que produjo la respuesta de estrés. Él definió al estrés como 'la respuesta no específica del organismo ante cualquier presión o exigencia'. En su terminología, el estrés es la respuesta total de tu organismo (mente y cuerpo) a cualquier estresor que experimentes. Pero el asunto se complica aún más por el hecho de que un estresor puede ser tanto una ocurrencia o un evento tanto interno como externo.” (i)
“En su uso popular la palabra estrés se ha convertido en un término genérico que connota todas las diferentes presiones que experimentamos en la vida. Desafortunadamente, esta manera de utilizar la palabra confunde si el estrés es la causa de las presiones que sentimos o el efecto de esas presiones, o para ponerlo en términos más científicos, si el estrés es el estímulo o la respuesta. A menudo decimos cosas como “me siento estresado” lo que implica que el estrés es lo que estamos experimentando en respuesta a lo que sea que nos está haciendo sentir de esa manera, y por el otro lado, “hay mucho estrés en mi vida”, que implica que el estrés es un estímulo externo que hace que nos sintamos de cierta manera.
Seyle optó por definir el estrés como una respuesta, y propuso otra palabra: “estresor”, para describir el estímulo o evento que produjo la respuesta de estrés. Él definió al estrés como 'la respuesta no específica del organismo ante cualquier presión o exigencia'. En su terminología, el estrés es la respuesta total de tu organismo (mente y cuerpo) a cualquier estresor que experimentes. Pero el asunto se complica aún más por el hecho de que un estresor puede ser tanto una ocurrencia o un evento tanto interno como externo.” (i)
Ahora que me he deshecho del estrés que me causaba el no tener una definición de estrés, puedo decir que este taller me hizo ver como los estresores que se manifiestan en mí y en otras personas son tan variados como situaciones podamos encontrar en la vida, y que esto tampoco es tan sencillo, ya que un mismo evento o situación, me afecta de diferente manera dependiendo del momento de mi vida en el que ocurre y el estado psicológico y emocional en el que me encuentre.
Parecería entonces que esto no tiene solución, ya que resulta muy difícil si no imposible, determinar un factor, o unos cuantos factores, que me causen estrés. Son tantos y tan variados que parecería que no hay una cura, no es como cuando tengo un dolor muscular que ya sé que si me unto una pomada de árnica o alguna otra, se me pasará el dolor en poco tiempo. Entonces ¿que podemos hacer?
Aquí es en donde entran en juego las valiosas técnicas y estrategias que nos enseñó la Mtra. Elena para manejar el estrés como: estrategias para vivir sabiamente y con un propósito, estrategias para cuidarte, estrategias para cambiar tu relación con el tiempo y estrategias para manejar tu mente.
Pero la enseñanza principal que obtuve de este taller, es que para poder aplicar todas estas técnicas, lo primero que es necesario es conocerme a mí mismo, escuchar mi cuerpo, darme cuenta cuando estoy entrando en una situación estresante y saber que puedo hacer la elección de seguir en ella o elegir aplicar alguna de las estrategias para manejar el estés.
Por último quiero decir que el estrés en sí mismo no es algo malo, es una reacción que se genera en el sistema límbico del cerebro que desencadena la respuesta de fuga-enfrentamiento que tenemos todos los seres vivos y que es lo que finalmente hace que sobrevivamos ante un peligro. Lo malo del estrés viene cuando esta reacción se produce ante estímulos que en realidad no significan un peligro inminente de supervivencia, sino que son reacciones que hemos desarrollado mentalmente cada uno ante ciertas circunstancias que nos preparan para cierta acción, pero cuando no podemos darle escape a esa reacción y la encerramos dentro de nosotros producen los resultados que comúnmente llamamos estés y que nos afecta psicológica y fisiológicamente.
Una vez más quiero darle las gracias a Elena y a todas mis compañeras por lo mucho que me enseñaron este fin de semana.
Alfredo Amescua V
(i) "Full Catastrophe Living", John Kabat-Zinn, PhD.
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