Especialidad en Psicoterapia de Pareja
CESIGUE
Antes de entrar a una
cirugía, había pasado por días de dolor y molestia, así como trámites
engorrosos. Me sentía res, olía a res… y me trataban como tal. Sin querer
aceptarlo en el momento, guardaba la tristeza, el miedo y mi vulnerabilidad.
Quería que todo pasara rápido. Y mientras me daban vuelta para inyectarme la
anestesia, sentí una mano acariciando mi cabello…lo hizo varios segundos. Nunca
supe si fue el cirujano, el anestesiólogo, el enfermero…sólo sé que eso que
hizo me permitió sacar mi tranquilidad y sentirme cuidada. Eso es un héroe.
Marvel y DC pudieran hacernos creer
que son las únicas máquinas fabricadoras de héroes. Supongo que ellos se
encargan de crearles el disfraz y una ciudad que necesite ser salvada o una
chica guapa que esté en peligro…y además comercializar con la idea. Lo lindo
del asunto es que desde mi concepción de lo que es ser un héroe, no es
necesario ni tener un comic, ni luchar contra el Guasón y mucho menos, andar de
mallas.
Creo que el fondo
generalmente es el mismo: alguien con una capacidad especial, una habilidad
poderosa que puede ayudar a otro que en ese momento se encuentra vulnerable, en
riesgo, no físicamente, sino en su persona, en su self. Imagina tal cosa. Que
aquel momento donde el mundo interno esté en pleno terremoto o derrumbe,
alguien llegue volando, o haga presencia de alguna manera para acompañar, para
dar apoyo, para mirar y hacer labor de contenedor. No hablo del héroe que salva
desde la frase “eres una víctima” sino
desde el héroe que dice “en estos momentos te encuentras frágil; te cuido, te
observo, te apoyo, mientras te estabilizas y tomas fuerzas para continuar”. O
algo así.
Y entonces esa capacidad
especial de la que hablo, esa habilidad poderosa le puedo llamar generosidad;
una persona que sabe dar de sí mismo a alguien más. Esto requiere ver al otro,
en verdad voltear a ver lo que una persona puede necesitar en ese momento de ajuste
y búsqueda de estabilidad. El poder sonreírle a aquel niño tímido que ha pasado
por bullying; el estar con una amiga cuando truena con su novio; el prestar un
teléfono a un extraño que acaba de chocar. Porque no hay nada que me pueda
brindar más seguridad, que el saber que si me estoy rompiendo en pedazos, hay
alguien ahí por lo menos para cacharlos en el aire o ayudarme a buscarlos, unos
segundos, minutos, o días.
Y así, por mi vida han
tenido hazañas muchos héroes; lo curioso es que dudo que muchos de ellos se
hayan visto como los vi yo; no siempre tuve la claridad para decirles y
agradecerles en el momento o después (creo que de ahí mi razón de escribir
esto). Porque creo que no hay algo más
humano, más heroico, que darnos al otro, cual red de un malabarista en cuerda floja.
No se llamarán Batman, ni
Flash, mucho menos Iron Man; tampoco creo que se parezcan a Superman, ni que
sean tan verde como Hulk. Los héroes de sus vidas, deben tener otros nombres o
haber pasado por el anonimato.
¿Recuerdan los héroes de su vida?
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