Paulina
Martínez Fortuno
Maestría
en Psicoterapia Infantil Gestalt
Antes de entrar a 2do semestre de la
Maestría en Psicoterapia Infantil estaba plagada de dudas, no sabía si podía
continuar, sin embargo cuando me decidí a hacerlo y me integré nuevamente con
mi grupo me sentí muy bien ya que se respiraba un ambiente de familiaridad. En
cuanto vi qué clases llevaría, noté que entre ellas se encontraba la de
Comunicación y Desarrollo Humano, he de admitir que al leer el nombre en mi
horario no me decía nada, ante esto comencé a crearme expectativas y a crear
conclusiones sobre el contenido de la materia (como suelo hacer cuando
desconozco las cosas). Al presentarme a clases llevaba conmigo todos estos
constructos que había elaborado, sin embargo al escuchar las palabras: “Círculo
Mágico” todos estos constructos se disiparon y por un momento me dejaron
desvalida, ya no sabía que pensar de la materia, así que dejé que todo fluyera,
esta actitud me ayudó a escuchar por completo de qué se trataría la materia y
cómo íbamos a trabajar.
Cuando la Maestra mencionó
que empezaríamos con prácticas para aplicar la técnica de Círculo Mágico sentí
un poco de ansiedad, sin embargo después me agradó la idea y me hizo recordar
el tiempo en el que asistí a la Facultad de Psicología, de igual forma me dejé
fluir.
Dentro de estas prácticas
no solo se incluía la intervención con niños, si no también dentro de nuestro
grupo, lo cual me agradó mucho porque de este modo estaría basándome en eso
para poder ir preparada al momento de intervenir con los niños. Aunque antes de
ésto pude observar cómo la Profesora llevaba a cabo dentro del grupo esta
técnica, lo que me resultó de mucha ayuda para mi, porque el aprender se me
facilita mucho más si es con ejemplos, y en todo momento fueron manejados por
la Maestra, así que sentí la clase ligera y llena de aprendizajes
significativos.
Todas y cada una de las
participaciones de mis compañeras como facilitadoras del Círculo Mágico dejaron
en mi una huella imborrable pues reforzaron mi amor propio, la confianza en mi
misma y en los otros, pude identificar sensaciones y emociones que no me había
permitido sentir. Además de que sentí que dentro del grupo se creo un ambiente
de seguridad y confianza que me agradó mucho, siempre me sentía muy contenta y
emocionada antes y después de cada clase ya que nunca sabía de que iba a tratar
la sesión y siempre aprendía algo nuevo. Estoy muy agradecida con el grupo y
con la Profesora por esta experiencia tan enriquecedora que llegó justo en el
momento que la necesitaba y siento que la viví con las personas indicadas.
El Círculo Mágico para mi,
es más que una técnica pues representó crecimiento a nivel personal y reforzó
muchos lazos con mis compañeras, además de que hice un viaje por el pasado al
recordar mi época de estudiante de Psicología y reafirmó mi amor por el trabajo
con niños. Resultó ser una manera no invasiva de llegar al corazón de los demás
y una herramienta de contacto que me permitió identificar y comunicar lo que
sentía en el momento.
Me llevo todos estos conocimientos y
experiencias que me permiten ser mejor profesionista, mejor amiga, mejor hija,
mejor hermana, pero sobre todo mejor persona.
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