Patricia Vidal Ruibal El amor es una fuerza energética que intenta pasar a través de nosotros y, cuando no lo logra, su estancamiento genera sufrimiento y síntomas. Todos hemos experimentado en algún momento el amor que no pudo ser expresado, por ejemplo: frente a una perdida repentina el corazón parece partirse, y la sensación de estar confuso es como decir: “¿y ahora qué hago con lo que está en mi corazón”? Es el amor que no sabemos dónde ponerlo. Hasta que la vida nos enseña y nos regala oportunidades para dejar fluir el amor al servicio de la vida, si es que hacia allí decidimos mirar. Existe un nivel de amor en la fuerza subyacente que nos dio la vida, en la unión de un hombre y una mujer: el amor espiritual que nos trasciende. Y creo que existe otro nivel del amor que se mezcla con otras afectividades, y que experimentamos de manera más consciente, resguardándolo a través del ego. Los niños absorben estas distorsiones que el ego ha generado en los adultos que lo rode