La nada y el vacío

Juan Pablo Allen Amescua

CEsIGue, Xalapa

Hacer nada es hacer precisamente algo: ¡Nada! Los adolescentes son especialistas en este acto, y los adultos se convierten en expertos en hacerles ver lo grandioso de sus actos de la Nada. La filosofía tiene mucho que decir al respecto, pero no es la intención del artículo ir a esas tierras. El objetivo es hacer una reflexión del cómo la Nada se convierte en Algo, y más allá de ello, la sensación y el efecto que produce: El Vacío.

En su libro de La Historia Interminable (La Película: La Historia Sin Fin), Michael Ende toca precisamente el tema de La Nada y cómo se va apoderando de Todo, creando una gran angustia entre la población de Fantasía, curioso es que el autor haga una conexión entre La Fantasía y La Nada, y más allá de ello: La Angustia. Para un adolescente hacer Nada es realmente estar en el momento, es estar en su mundo, hay un Algo en esa Nada, como adultos podemos decir “Deja de Hacer Nada y de estar Fantaseando y Ponte a Hacer Algo PRODUCTIVO”, este es un gran discurso, difícil de entender y explicar. En un mundo donde lo material se sigue valorando sobre las personas, la naturaleza, el dinero y los objetos materiales cada vez toman mayor valor, una persona vale por tan objeto pueda ser. El impacto en la naturaleza de lo que hacemos no importa, cambiar una persona por otra, por dinero, no importa, somos intercambiables, desechables. Parece que en esto la Nada no entra, no tiene lugar, el vacío es el que toma poder, la ansiedad y con ella, el miedo. Ante la Nada, no hay nada que hacer, ante el vacío es el llenarlo, el problema es que el vacío que se siente y rodea el ambiente, no se llena con “Nada”, no tiene fin, es un vacío sin límites, es un vacío-vacío. La angustia y desesperación de la que hablaba Michael Ende ante la Nada se convierte en un vacío que devora todo a su paso, no perdona raza, sexo, idioma, clase social, clase económica.

La Nada de los Adolescentes, de los niños ahora se convierte en Juegos de Vídeo, programas de TV, ya no existe ese contemplar, el estar en el estar, ahora el Estar es un Vacío. La Nada del adolescente es un algo, cuando dicen “no tengo nada” es que están teniendo algo, pero cuando dicen “ya nada me importa” ese es un problema serio, porque ese estado de solo estar desaparece, el estar consigo mismo, el momento de la fantasía, el momento de disfrutar ese instante de vida se va y llega este terrible vacío que lleva a la depresión, a la agresión, a la avaricia, al querer por querer.

Esto es una reflexión, ¡piénsalo! Cuando dices Nada, realmente ya estas diciendo Algo, pero cuando “No tienes Nada que decir…”, “Cuando no tienes Nada que hacer…”, “Cuando no tienes Nada que desear…”, ese es un vacío, la Nada se ha ido, el hueco que queda se hace más grande cada vez y con éste la vida va perdiendo sentido. Piénsalo, la Nada, es Algo.